Algo hizo bien Luis en esa primera cita, porque tres semanas después Laura, convencida de no dejar pasar ni un día más, agarra sus maletas y se va de fin de semana a Puebla. Deliciosas cenas, ricos vinos, y pláticas interminables para esos 3 días.
Para suerte de Luis, se acercaba Semana Santa.. y decidió probar aguas organizando una cita en San Miguel de Allende.. cosa que no concretó! Y al cabo de una semana pasó a visitar a Laura a Victoria con la excusa del cumpleaños de su hermana.. claro..
Ella cumplía 30 años y él, decidido a conocerla… le escribió para felicitarla. Tanto en común y sin haberse topado antes, fue mágico, como si ya se hubieran conocido de años.